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Dado las noticias
anteriormente expuestas, podemos evidenciar nuevamente la vulnerabilidad de los
niños y la necesidad de acompañamiento y protección por parte de su núcleo
familiar y del Estado. Es fundamental, identificar que si no se educan, si
padecen problemas que los inducen a malos caminos, si existen carencias incluso
afectivas, no se puede pretender tener jóvenes con proyecciones positivas como
de emprendimiento por ejemplo; serán más proyecciones como ser el líder de una
banda o pandilla; el futuro está en ellos.
Es impresionante y
alarmante que no paren noticias de agresión y maltrato hacia los menores en la
capital como lo fueron las ocurridas en la noche de Halloween, pues fueron
presentados 6 homicidios en donde encontramos un menor de 11 años que fue
impactado por un arma de fuego en un intercambio de disparos aquella noche y la
agresión que recibió un niño de 14 años de edad mientras se encontraba en una
fiesta en la casa de un amigo, presuntos ladrones solo buscaban en celular del
menor.
Es realmente indignante
el saber que una persona pueda perder la vida por la inseguridad en la ciudad
de Bogotá, como lo fue el caso de un joven que al tratar dos hombres de robarle
su bicicleta lo asesinaron propiciándole diversas puñaladas en la espalda y
estómago.
Adicionalmente,
encontramos noticias que causan indignación con el sistema de salud que se está
manejando la ciudad, pues como es posible que no exista una camilla en un
centro asistencial especializado para trasladar a una menor con una rara
enfermedad denominada “huérfana”, la menor lleva tres meses esperando y nadie
le da una solución a sus familiares, es aquí dónde nos cuestionamos: ¿Qué
espera el gobierno y la secretaria de salud para actuar y tomar medidas para
cambiar y mejorar la calidad de estos centros?, pues no podemos permitir que
menores sigan muriendo por falta de atención médica.
También, queremos hacer
un llamado a todos los padres y niñeras o niñeros para que tengan cuidado al
momento de cuidar o dejar cuidando a sus hijos, ya que no se pueden seguir
presentando cosas como el extraño caso
del bebé ahogado en un balde lleno de agua. Esto nos debe dejar pensado a quien
le encargamos el cuidado de nuestros niños cuando nosotros no podamos cumplir
con este deber.
Todo esto, nos lleva a
pensar en qué tanta eficacia tienen los planes (por ejemplo, como la
organización de nuevos lineamientos en el ICBF), si se siguen presentando
problemas por carencia de protección a los menores; o si tal vez es que se
están enfocando en ciertos niños y no por ejemplo, en los del Bronx. Es decir,
consideramos necesario la revisión y mejoramiento en planes de intervención a
los menores, para así, erradicar los problemas de raíz. Tal vez es utópico
pensar en que no se presentarán jamás problemas que padezcan los niños y
jóvenes, sin embargo, si se puede anhelar y alcanzar niveles bajos de la
presencia de problemáticas.
A pesar de las noticias
negativas presentadas anteriormente, existe aún una luz que nos lleva a tener
esperanzas de que la situación de la ciudad capitalina pueda mejorar. Entre
ellas se encuentran noticias gratificantes como los 74 colegios privados que
fueron calificados en alto nivel en todo el país, este ranking lo dio los
estudios del Col-Sapiens; esta noticia, junto a otra que afirma que el
implemento de tecnologías en aulas de clases impulsa a los jóvenes a estudiar,
nos lleva a pensar que pueda existir una mejora de la calidad de educación
presentada en todos los colegios de la capital.
En
esta misma línea, esta semana se llevó acabo el primer seminario de
actualización de coordinación de los
jardines infantiles sus principales objetivos eran modernizar los jardines
infantiles y cambiar las prácticas de
salud y nutrición; esto significa una mejor atención a los infantes y niños que
puedan acceder a estos. Todo lo anterior puede ser considerado un gran paso
para el desarrollo en cuanto a los
cuidados que se presentan en los jardines infantiles.
En otro aspecto
totalmente diferente, es gratificante decir que las parejas del mismo sexo
actualmente tienen el mismo derecho de adoptar a un niño al igual que las
parejas heterosexuales. Esto es bastante reconfortante debido a que cada ser,
por el simple hecho de ser reconocido como persona debe tener los mismo
derechos y deberes, por ende, era bastante ilógico negarle a una pareja
homosexual su derecho a adoptar, cuando un niño lo que realmente necesita es
amor y comprensión sin importar de dónde este provenga. Adicionalmente, este es
un gran paso para hacerle ver al mundo que un niño no crecerá con algún trauma
o déficit por tener padres del mismo sexo. Es totalmente reconfortante expresar
que Colombia es uno de los pocos países
de Latinoamérica en aprobar estas leyes
esto viene siendo un gran paso para el cambio social.
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